Miro las fotografías del álbum
buscando respuestas,
algo que me haga volver,
volver la vista para comprender,
para poder recuperar el momento
ese instante anterior
al que se produjo el cambio.
Una página, otra situación
una vez y dos más,
observo cada detalle
y aún una vez más…
Entro en bucle sin encontrar la
salida,
sin llegar a una explicación lógica.
Siento un mundo de fractura y
desgarro en mi interior.
Te busco pero ya no estás,
dónde tu sonrisa, tu alegría
infantil,
dónde la inteligencia y las ganas de
crear.
Tus diferencias están anuladas
y no sé cómo recuperar tu genialidad.
Has dejado que te consuman tus debilidades,
has sucumbido a los fantasmas de tu
madurez.
Sé que ahí, en ese álbum, está la
respuesta,
está la solución, sólo hay que llegar
a la instantánea perdida
para rectificar los miedos de tu
existencia
y volver a Empezar,
sí, Empezar, “empezar el día de nuevo” como solías decir,
para encontrar el alma de la que
fuiste
en aquel último instante antes de
caer…